Como ya hemos comentado con algunos de vosotros en persona, nos ha resultado sorprendente el apetito comprador del Sr. Brufau, presidente de Repsol, no tanto por el hecho de que haga una adquisición, cosa esperable después de la indemnización recibida por la expropiación de YPF, y lo saneado que quedó su balance, si no más bien por la cuantía de la operación, un bocado gigante para la compañía española, y sobre todo, por el momento en el que se produce.
Aquí podéis encontrar la información detallada de la operación:
No terminamos de entender la compra, ni el precio pagado…por una empresa como Talisman Energy que, ante la poca información financiera que hemos podido conseguir, ya estaba reduciendo ventas un 50% en los dos últimos años y al borde de entrar en pérdidas, antes del reciente descalabro en el precio del «oro negro».
Ni que decir tiene, que siendo Talisman una exploradora-extractora pura (100% «upstream»), con este entorno precios en su producto final, lo tendrá todavía más complicado.
Y en esta situación…¿pagar una prima por sus acciones del 50%? ¿y de casi el 100% sobre la cotización de justo antes de empezar los rumores de OPA?
Cabe destacar que la empresa bajaba un 67% en lo que llevaba de año hasta que Repsol saltó a la palestra, suponemos que alguna justificación habría para ello.
Pues nuestros respetados analistas de Bankinter, nos lo han puesto en negro sobre blanco….
Sobra decir, que ponemos a Repsol en rampa de salida en aquellas carteras que todavía la conservan, tan pronto encontremos un punto óptimo de salida.
*Este artículo no representa una recomendación de inversión, si no opinión profesional acerca del tema.